“El hermano ofendido es más tenaz que una ciudad fuerte y las contiendas de los hermanos son como cerrojo de alcázar[1].” Proverbios 18:19 RVR
¿Te has dejado de hablar con tu hermano (a)? ¿Cuánto tiempo? ¿Es irremediable? Supe la historia de un pueblo indígena en Tabasco, México; en este lugar hablan Ayapaneco[2] y español, la lengua indígena ya está en extinción, sólo dos lo hablan (aunque hay otras referencias[3]), ya no hay descendientes que lo practiquen y estas dos personas ya son grandes; así que lo más seguro es que desaparecerá.
¿Qué cosas no? En sus manos está toda una riqueza cultural, una herencia de cientos de años y por una diferencia –no quiero ser amarra navajas o inventa chismes-, indiferencia, apatía o lo que sea... todo es tirado por la borda esto. Sin juzgar ¿Cuántas veces no hacemos lo mismo? Porque no es la distancia, estas personas viven a 500 metros ¿y tu hermano(a) o padre? tampoco están tan lejos y no les puedes ni mirar. El problema es la ignorancia o el orgullo. El orgullo es como una ciudad fuerte e impenetrable que nadie puede derribar, porque el orgullo no deja pensar en nada que no sea en lo ofendido que estás ¡ah! y lo lastimado; esto te cierra como candado.
Practica el perdón y recibe perdón. Jesucristo jamás permitió que una ofensa le impidiera su relación con su Padre, que interfiriera en su llamado, ni que le obstruyera para amar a la humanidad… Jesucristo lo perdonó todo, nada se guardó para después, perdonó y dejó todo en el pasado y continuamente lo vive para que pueda amar sin estorbos, está abierto a las personas. Él no es un cerrojo él es la puerta, siempre abierta al perdón y al amor…vayamos a él.
[1] Alcázar significa fortaleza o recinto fortificado.
[2] Ver: http://regioblogs.com/2011/04/las-2-unicas-personas-que-hablan-lengua-indigena-mexicana-en-peligro-de-desaparecer-no-se-hablan/
[3] Checa: http://es.wikipedia.org/wiki/Idioma_ayapaneco
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