"Pues que Cristo ha padecido por nosotros en la carne, vosotros también armados del mismo pensamiento; pues quien ha padecido en la carne, terminó con el pecado." 1 Pedro 4:1 RVR
Creo que la peor batalla que puedes tener, no es con tus padres, el vecino o con tu rival, sino contigo mismo. Si no tienes la mente de Cristo...¿qué pensamientos tendrás? Ya me imagino (y no creas que por ser yo muy pura o casta), todo ser humano tiene una verdadera batalla cada día; por eso es tan importante saber quien es dueño de esos pensamientos.
En estos instantes hay quienes a gritos piden ayudan pues sus pensamientos los atacan, creen que los odian, que no son amados, que merecen morir, que alguien los persigue, que la vida es poca cosa, sufren de miedo a no sé qué, que no valen la pena, que son miserables... y todo sucede en esa cabecita que parece tan normal e inocente ¿o no?
Pero la Buena Nueva es que Jesucristo murió en la cruz para que fueras libre de esta esclavitud,de tu pecado, de tu egoísmo o malas conductas... cuando tú reconoces que él es Dios, entonces puede ser Señor de esos pensamientos sin orden y sin razón. Tus pensamientos te atacan porque no tienen dueño, y no hay mejor dueño que Jesucristo. En él hay todo poder, autoridad y amor para ayudarte, reconócelo hoy.
No hay comentarios:
Publicar un comentario