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| Judas es el cuarto (izq. a derecha) de pelo y barba negra. |
“Hay camino que el hombre le
parece derecho; pero su fin es camino de muerte.” Proverbios 14:12 RVR
Un joven guapo y viril fue
seleccionado por su belleza para posar en la obra de un pintor, en su lienzo
plasmaría “La última cena” y quería que este joven modelara como Jesucristo.
Tenía los rasgos, facciones, cabello, ojos o presencia dignos de representar a
Jesús; por ello lo seleccionó sin titubear. Pasado siete años, en la búsqueda
del último personaje de su obra: Judas Iscariote, fue a parar a una cárcel
donde encontró al hombre perfecto para este papel por sus cicatrices, ira y
amargura en la mirada, la imagen desaliñada y sucia… así que se lo trajeron a
su estudio. Al terminar de pintar al modelo este cayó de rodillas pidiéndole
que lo mirara bien y lo reconociera, pues él fue quien representó a Jesucristo ¡¡¡hace
siete años!!![1]
¡Wow! ¿Cómo es posible? ¿Qué
sucedió en esos años? Las buenas o malas decisiones inevitablemente afectan y
no se pueden evadir, se puede fingir que no están, darles la vuelta, esperar –si
se puede- algo de tiempo; pero el único que se engaña es uno mismo. Este modelo
en siete años vivió y eligió vivir una vida desenfrenada que lo llevó al punto
de estar encarcelado, solo y amargado.
Cuida tus decisiones, no puedes
tomarlo a la ligera, cada una de ellas tienen un peso eterno, aunque todo pinte
bien, pide consejo a Dios, lee su Palabra, llena de infinita sabiduría para
guiarte y busca a tus padres. ¿Qué tal que tú decisión tenga final de muerte?
Eso le pasó a este joven, en su andar diario sus caminos le parecieron
correctos; sin embargo lo llevaron a un fin poco deseable. La voz de Dios está
en la Biblia, te dirá qué camino tomar, entonces tu historia si será de modelo
porque ha sido modelada por Dios.
[1] La última cena de Da Vinci: http://www.taringa.net/posts/info/2393858/Algo-curioso-de-La-Ultima-Cena-de-Leonardo-Da-Vinci.html
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