"...porque a dondequiera que tú fueres, iré yo, y
dondequiera que vivieres, viviré. Tu pueblo será 
mi pueblo, y tu Dios mi Dios."
Rut 1:16 RVR
Muchos hablan del poder de la amistad, pero otros la viven; aquellos que renuncian a su egoísmo y están dispuestos a compartir y ser leales pueden saborear una verdadera amistad. Sin embargo hoy en día pareciera que esto escasea, la mayoría es amigo (a) si obtiene algún beneficio o status, piensa ¿cuán amigo (a) has sido tú? porque recuerda que la amistad no sólo se trata de que sean buena onda contigo, sino el compromiso que adquieres al tener una amistad.
En esta sociedad que solamente piensa en el individualismo, se ha olvidado de lo poderosa que es la amistad, esta no tiene limites; es decir, una persona logra mucho, pero dos logran más. Los grandes personajes bíblicos, raramente hicieron algo solos, se recargaron en alguien más -y Dios presente- fueron acompañados, seguidos o ayudados por un amigo. La amistad se da en los momentos y con las personas menos esperadas, el factor común ha sido el compromiso del uno con el otro.
¿Creerías que una suegra y su nuera sean grandes amigas? ¿crees que exista la verdadera amistad hoy en día? son preguntas para reflexionar; la Biblia es muy explícita, si se puede tener un amigo (a) y que puede ser una gran influencia para ti y para el mundo que te rodea, solo tienes que tener cuidado con tus pactos de amistad, en el caso de Rut y Noemi se ayudaron, vieron la una por la otra, ya a la larga fueron parte de la descendencia de Jesucristo. El poder de la amistad radica en que si no es bien encausada destruiría vidas y la tuya sería la primera, por tanto cuida tus amistades y sé leal con las que tienes -y que Dios sea su principal fundamento.
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